Comunidad Foggia

Las Siervas de la Divina Providencia continúan hoy la acción caritativa y social de su venerable fundador, padre Pascual Uva, dejándose abrazar por el amor de Cristo, abandonadas a su Divina Providencia. No perteneciéndose ya a sí mismas, el Espíritu las atrae y las llama a responder a una vocación especial. El amor característico, que el Señor Jesús les ha dejado, se convierte en su estilo de vida en favor de quien tiene necesidad.

Las Siervas, hoy más que nunca, se insertan en la historia de la "pasión" de Dios por el hombre para promover una nueva calidad de vida. Su vocación específica las hace expertas en humanidad para establecer una relación de ayuda saludable, de modo que se realice "una salud salvada" y una "salvación sanada".